Dos términos de moda SOSTENIBILIDAD y EFICIENCIA, estos últimos tiempos nos inundan en casi todos los campos, pero es fundamental tener las ideas claras cuando vamos a realizar una inversión tan importante como la construcción de nuestra vivienda.
Si ponemos en nuestro buscador web términos como "casa eficiente" o "casa sostenible", entramos en un mundo de ideas y ofertas, opiniones y soluciones mágicas, mejor "madera", mejor "materiales tradicionales", mejor "materiales eficientes"........
Como decía mi compañero Jose Luis (Compas y Cartabon - Madrid);
"La sostenibilidad como concepto no está solo en el tipo de construcción, ya sea tradicional o de madera, de hecho se nos llena la boca en los últimos años de sostenibilidad y desde hace un par de años de eficiencia y eficiencia energética y no solo en construcción, parece que si ahora mismo, un producto no es eficiente ni sostenible, no es un buen producto y el problema es que el uso de estos términos se está generalizando y banalizando de tal forma que está perdiendo su significado".
El termino eficiente desde varios puntos de vista tales como el energético, de uso y de confort entran dentro del paquete que implica la sostenibilidad.
Podemos movernos en un amplio abanico de posibilidades en el mercado que van desde el purismo mas absoluto, pasando por el pragmatismo y llegando al negocio consumista de la sostenibilidad.
Para la construcción de una vivienda sostenible es fundamental un estudio profundo en el que deben entrar en juego varios factores, entre ellos como mínimo:
- a) Las necesidades del futuro usuario de la vivienda
- b) La capacidad económica disponible
- c) Las características físicas, estéticas y urbanísticas del entorno donde se va a situar.
- d) La disponibilidad de materiales adecuados en la zona de construcción.
Solo a partir de este momento podríamos comenzar un estudio realmente adecuado de sostenibilidad y eficiencia para una inversión tan importante como es la construcción de nuestra vivienda.
Tanto la sostenibilidad y la eficiencia deben ser valoradas a lo largo del ciclo de vida de la edificación, desde la concepción de la idea hasta que el inmueble sea demolido, reformado o sustituido, sin olvidar nunca el bolsillo del inversor.
Recuerdo que estuve en una conferencia sobre este tema y en un momento determinado surgió la pregunta;
¿Que es mas sostenible?, uno de esos viejos coches cubanos con mas de 50 años y que siguen funcionando o uno de nuestros modernos coches híbridos de consumo casi inexistente y máxima eficiencia. A primera vista esta clara la respuesta. Pero deberíamos meditar en cuantos coches híbridos habremos comprado y utilizado y desechado a lo largo de esos 50 años, tal vez 5 o 6 de media.
Es el momento de sumar el costo ecológico y energético para fabricar un viejo coche cubano que lleva funcionando 50 años y 5 coches híbridos que habremos consumido y desechado en el mismo tiempo, sus gastos en combustible, su mantenimiento y finalmente su reciclado.
Quizás esto nos pueda llevar a pensar que la sostenibilidad es otro gran negocio de consumo...
Indudablemente creo que podemos resolverlo aplicando un poco la lógica racional, en conjunto con los avances tecnológicos y la experiencia de siglos de construcciones.
El emplazamiento de la vivienda, las condiciones del entorno, origen de los materiales a emplear, costos de CO2 de producción, traslado y reciclado posterior, energías disponibles, contribución a la economía local, estética, confort y capacidad económica del promotor son condicionantes a la hora de diseñar y ejecutar una edificación sostenible y también es muy importante y definitivo un adecuado uso a lo largo de toda su existencia.
No hay una solución de construcción eficiente o sostenible que sea aplicable de forma general a cualquier sitio, circunstancia o propietario.
Mi consejo es acudir a un equipo técnico especializado.
Si necesitas la planificación, proyecto o construcción podemos ayudarte.
Recuerda que estoy a tu disposición para cualquier consulta o servicio.
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